RETO MÓDULO 1: EL PAPEL DE LA MUJER EN LAS PROFESIONES STEM

Hola de nuevo. En esta ocasión, y con motivo del reto planteado en el módulo 1, me gustaría detenerme a profundizar en la desigualdad entre mujeres y hombres presente en las carreras y profesiones dedicadas a las ciencias y tecnologías o, por su acrónimo en inglés, STEM (Ciencias, Tecnologías, Ingenierías y Matemáticas).

La UNESCO calcula que en este tipo de carreras la presencia de mujeres es de solo un 35%, y en el caso concreto de la tecnología en España se reduce al 12%. En contraste, el 55% de las matriculaciones en la universidad corresponde a mujeres. Es importante corregir esta infrarrepresentación de la mujer en estos campos, puesto que normalmente estas carreras están caracterizadas por una menor tasa de desempleo y salarios más elevados. Por tanto, fomentar las carreras técnicas para que su adopción por las mujeres aumente puede de igual modo ayudar a combatir la brecha salarial todavía existente y mejorar la empleabilidad de las mujeres, que a día de hoy acusan más el paro que los hombres (12,61% vs 10,08%, de acuerdo a la última Encuesta de Población Activa publicada por el INE para el segundo trimestre de 2024).

Numerosas iniciativas están apareciendo para visibilizar esta problemática e impulsar el fomento de estos estudios entre las mujeres. Se puede destacar el programa STEM Talent Girl, un proyecto educativo promovido por la fundación ASTI para atraer a las generaciones más jóvenes de chicas de forma que puedan desarrollar su talento en las vocaciones STEM.

También resulta relevante el papel que tienen las instituciones gubernamentales en esta materia. El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia aprobado por el Gobierno en 2021 como hoja de ruta para la recuperación de nuestro país tras la crisis sanitaria, económica y social de la pandemia de la Covid-19 pone el foco en la igualdad de género como uno de los cuatro ejes tractores y que vertebra todas las medidas del Plan de manera transversal. Se recalca en el mismo la necesidad de formación para acabar con las distintas brechas de género, incluida la digital con la aprobación de un Plan Nacional de Competencias Digitales. De igual modo, enfatiza la necesidad de una mayor presencia femenina en las carreras STEM, poniéndose como objetivo para 2026 aumentar el porcentaje de especialistas digitales en la economía española consiguiendo una paridad de género en este colectivo.

Como se puede apreciar, todavía se está lejos para conseguir una igualdad plena en un sector tan relevante actualmente y que lo será aún más en el futuro como es el relativo a las ciencias y las tecnologías. Si bien existen iniciativas que buscan el impulso de estas profesiones entre las mujeres jóvenes, es necesario seguir realizando esfuerzos para atraer talento femenino. Esto repercutiría de forma muy positiva en la sociedad, ya que supondría una mejora de la empleabilidad de las mujeres, su satisfacción y desarrollo profesional así como la generación de riqueza para la economía del país.